La naturaleza es fuente de
vida
Los seres humanos formamos parte de la naturaleza y calidad de nuestra vida depende de todos los seres
que comparten este planeta. Debemos cuidar la naturaleza porque de ella depende nuestro bienestar.
La naturaleza se encuentra en un proceso permanente de movimiento
y transformación. Se manifiesta de diferentes maneras, por ejemplo, a través de fenómenos naturales de cierta regularidad
como la lluvia, los vientos, los temblores de la tierra o el desgaste natural del suelo que produce la erosión.
Los terremotos, las inundaciones, los incendios, las erupciones
volcánicas, las tormentas tropicales, los tornados, las tormentas eléctricas, los deslizamientos, las sequías, las plagas
y los fenómenos llamados “El Niño” y “La Niña” forman parte de la naturaleza, como el sol y la lluvia.
Estos fenómenos afectan a casi toda la Tierra. En tiempos
pasados, la gente tenía leyendas para explicar estos fenómenos. Decían que el volcán estaba enojado, o que los dioses demandaban
un sacrificio. Hoy día, la ciencia, la tecnología y la historia nos ayudan a comprender estos eventos en lugar de simplemente
temerlos.
Sin embargo, estos fenómenos todavía siguen convirtiéndose en desastres, y afectan a mucha gente en cada
rincón del planeta donde aún no se ha arraigado una cultura de prevención.
Fuentes Bibliográficas:
EIRD/ONU - UNICEF, “¡Aprendamos a prevenir los desastres!
Los niños y las niñas también participamos en la reducción de riesgos”. San José, Costa Rica, 2003. |